El bizcocho de arándanos es un postre clásico que nunca pasa de moda. Es fácil de hacer y tiene un sabor delicioso. La combinación de la dulzura de los arándanos con la riqueza de la mantequilla y el azúcar es simplemente irresistible.
En esta receta, le damos un toque de limón para darle un sabor más fresco y afrutado. La ralladura de limón combina a la perfección con los arándanos y crea un bizcocho que es a la vez dulce y ácido.
Ingredientes: Bizcocho de arándanos
200 g de mantequilla sin sal, ablandada
200 g de azúcar
2 huevos grandes
1 cucharadita de extracto de vainilla
2 cucharadas de ralladura de limón
250 g de harina para todo uso
1 cucharadita de levadura en polvo
1/2 cucharadita de sal
1 taza de arándanos frescos
Preparación: Bizcocho de arándanos
Precalienta el horno a 180 grados C. Engrasa y enharina un molde para pan de 9×5 pulgadas.
En un tazón grande, bate la mantequilla y el azúcar hasta que estén suaves y esponjosos.
Agrega los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición.
Agrega la vainilla y la ralladura de limón y mezcla bien.
En un tazón aparte, mezcla la harina, la levadura y la sal.
Agrega los ingredientes secos a los húmedos alternando con 1/2 taza de leche, comenzando y terminando con los ingredientes secos.
Incorpora los arándanos.
Vierte la masa en el molde preparado.
Hornea durante 50-60 minutos, o hasta que un palillo insertado en el centro salga limpio.
Deja enfriar en el molde durante 10 minutos antes de desmoldarlo y enfriarlo completamente sobre una rejilla.
Consejos:
Para obtener un sabor más intenso a limón, puedes agregar 1 cucharadita de zumo de limón a la masa.
Si no tienes arándanos frescos, puedes usar arándanos congelados. Solo es importante que los descongeles completamente antes de agregarlos a la masa.
Para un bizcocho más húmedo, puedes agregar 1/4 taza de yogur griego a la masa.
Para servir, puedes espolvorear el bizcocho con azúcar glas o glaseado de limón.
Glaseado de limón:
100 g de azúcar glas
2 cucharadas de zumo de limón
Mezcla el azúcar glas y el zumo de limón hasta obtener una textura cremosa.
Vierte el glaseado sobre el bizcocho frío y deja que se endurezca.
¡Disfruta!
