Esponjosa y con poco azúcar, tiene asegurado un resultado positivo. Se prepara en un segundo y no durará casi nada en casa.
Puedes alegrarla esta tarta como quieras y prepararla para un evento extraordinario.
A pesar de que no es necesario que te molestes en ningún evento ya que completar tus cenas con un trozo de esta auténtica delicia que puedes gestionar en un día habitual.
Intenta no parar ni un segundo y ponte manos a la obra. Las tartas de queso siempre ganan solas. Con ésta, sencilla, te aseguro el éxito.
Cómo hacer tarta de queso con horno
Triturar las galletas con un robot y mezclarlas con la mantequilla blanda. Formando una pasta. Cubrir el fondo de 6 moldes individuales, presionando con la mano.
Cocer en el horno precalentado a 160ºc durante 10 minutos. Sacar y dejar enfriar.
Mientras, batir las yemas de huevos con el azúcar y el azúcar avainillado; añadir el queso y el zumo de los 2 limones. Incorporar el gelificante y mezclar muy bien.
Mezclar las claras con la pizca de sal a punto de nieve. Montar también la nata. Agrega las claras y la nata por separado a la preparación del queso para que adquiera volumen y consistencia.
Llenar los moldes y dejar en la nevera por 20 minutos.
Desmoldarlos y adornarlos con la juliana confitada, y sólo nos queda disfrutar de esta Tarta de queso con horno.
Un plus: el mismo postre se puede hacer con 6 hojas de gelatina previamente remojadas en agua fría y escurrida en lugar de instant gel. En este caso habrá que dejarlo cuajar en nevera al menos 5 horas como mínimo. También te podría interesar esta espectacular receta a base de queso
